¿Que me cunda?

Una expresión muy "de madre" eso de ala, que te cunda. Pues me he aplicado el cuento, y realmente me ha cundido bien. Bien es cierto también que llevo unos cuantos días sin escribir nada, así que no podía ser de otro modo.
En estos días de desaparición he hecho muchas cosas: me ha dado tiempo a descansar, a salir unos días, a redecorar habitaciones, y por supuesto a finalizar proyectos que tenía a medias.

El primero en finalizar ha sido "Le temps qui passe". En una entrada anterior lo presentaba como proyecto. Si recuerdas, elegí un lino minúsculo en color azul oscuro. Cuando digo minúsculo, es minúsculo de verdad: en un centímetro de tela, caben 20 cruces tomando un hilo de tejido. Como aún no tengo inclinaciones suicidas, lógicamente lo he bordado con un hilo sobre dos de tela. El mismo día que empecé, me di cuenta de que se trataba más de un lino para confección que para bordado, pero ya estaba todo elegido y comprado. Y aquí esta el resultado.









No tenía muy claro qué ponerle para cerrarlo. Finalmente se me ocurrió utilizar unas perlas que me regalaron hace mucho tiempo a modo de botoncillo, y con el mismo hilo que he bordado los motivos he hecho un cordondillo enrollando para poder cerrar. Creo que ha quedado muy mono.




Otro proyecto finalizado es este estuche para agujas del libro "Labores decorativas para la casa" que tantas satisfacciones me está dando. No me costó barato, pero lo estoy amortizando a base de bien.
Le bordé unas flores en la tapa, porque quedaba un poco soso y aproveché unas lentejuelas y abalorios de repuesto de un vestido que tengo de Flamenco para darle algo de brillo. Como las bordé una vez que el estuche estaba montado, se ve por la trasera. Nadie es perfecto, y las primeras veces que se hace algo, mucho menos. Yo estoy encantada, la verdad.








También he terminado un free de "Au pays d'Alice". Aquí ando algo más perdida... Tenía intención de hacer un colgante para la puerta, terminado en pico con sus vainicas y todo (olé valienteeee!). Tan emocionaba estaba con mi idea que corté mal la tela y no dejé espacio suficiente para poder terminarlo como quería.
Lo he hecho en un lino blanco que tenía hace siglos y me parecía que quedaba muy soso. Como soy una valiente, me atreví a teñirlo con té, para darle otra gracia. La verdad es que en la foto no se aprecia, pero ha quedado muy bonito, le da un toque antiguo precioso. No será la última vez que me atreva a teñir.



La cosa es que no tengo muy claro cómo terminarlo. Me pide un marco de esos que en lugar de llevar paspartú lleva cristal, porque he intentado ponerle pasamanería alrededor; hacer un cojincito para alfileres... pero no lo tengo nada claro. De momento lo tengo ahí en el mueble a ver si se me enciende la bombilla y le doy el acabado que se merece.





He finalizado más cosas, pero aún no les he hecho fotos. A ver si mañana no llueve (que esta tarde ha caído un tremendo tormentón) y continúo el reportaje gráfico.

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